En este nuevo libro, el filósofo francés Rémi Brague señala cuál es el problema fundamental de la modernidad: ha dejado de considerar el mundo creado y la humanidad como intrínsecamente valiosos.
En vista de ello, el autor explora en Manicomio de verdades la idea de que la humanidad debe regresar a la Edad Media. No la Edad Media del presunto atraso y barbarie, sino una Edad Media que entendía la creación --incluidos los seres humanos-- como el producto de un Dios inteligente y bondadoso. Los desarrollos positivos que se han producido dentro del proyecto moderno ya no se basan en un proyecto racional porque la existencia humana en sí ha dejado de ser el bien que alguna vez fue.
Brague se remite a nuestros antepasados intelectuales del mundo medieval para presentar un argumento razonado de por qué la humanidad y las civilizaciones son bienes que vale la pena promover y preservar.
«¿Qué pasa con las virtudes o ideas --o más bien verdades-- que [la modernidad] ha llevado a la locura? Mi tesis es que hay que liberarlas de la camisa de fuerza, sacarlas del manicom