Un velo de misterio oculta la figura de una de las mujeres más fascinantes del pasado siglo: la ajedrecista Sonja Graf. Nacida en Múnich a comienzos del siglo XX, de niña fue maltratada por sus padres, huyó del Tercer Reich en vísperas de la Segunda Guerra Mundial y participó en el Torneo de las Naciones, en Buenos Aires, sin otra bandera que un cartel que decía «Libre». Eterna rival de la mítica campeona mundial Vera Menchik, Graf vestía ropa de hombre, fumaba y bebía como un hombre y se acostaba sin problemas con mujeres y hombres. El encuentro entre Graf y una enigmática admiradora en una cafetería de Los Angeles —en un largo diálogo donde van surgiendo los nombres de Marlene Dietrich y Humphrey Bogart, entre las sombras del nazismo, el feminismo y el psicoanálisis— vertebra esta novela apasionante de David Torres que es también, de algún modo, una búsqueda de la identidad y una partida de ajedrez.