Pedro es un niño que se siente diferente. Mientras que los demás aspiran a ser futbolistas o astronautas, él quiere ser santo. Ayudado por una de sus profesoras y animado por una madre profundamente católica, decide hacerse monaguillo en la parroquia de su pueblo, lo que provoca las burlas y los insultos de sus compañeros.
La vida de Pedro da un vuelco cuando Mario, uno de sus acosadores, aparece en la iglesia con la intención de ser monaguillo, corrompiendo así uno de los últimos espacios seguros que le quedan y alterando su deseado camino hacia la santidad.
Niño santo es una historia sobre el acoso escolar, la religión, la culpa y el despertar sexual ambientada en un pequeño pueblo manchego de los años noventa. Siguiendo el camino de Nido de pájaros, su primera novela, Luis Maura reflexiona sobre la búsqueda de la identidad en el entorno rural y la influencia de la familia en la infancia, al mismo tiempo que cuestiona la constante necesidad de cumplir las exigencias de una masculinidad hegemónica a la que hay que adaptarse o, de lo contrario, sufrir las consecuencias.