«Todo se había desencadenado por lo que escribió en su diario doce años atrás. Un pasado que había tratado de olvidar, despojarse de él, a pesar de que todavía le devolviera con nitidez su imagen en forma de su primer amor». 1998. Víctor Castro es el presentador estrella de televisión; tiene fama, dinero, popularidad y la vida le sonríe. Sin embargo, todo cambia cuando se ve envuelto en una situación traumática que se hace pública. La noticia produce un tsunami que amenaza con destruir su imagen, el cariño de la gente e incluso puede conllevarle la pérdida de su empleo. Al borde del precipicio, casi a punto de perder la cordura, se despierta en él una necesidad de desvelar los secretos enterrados de su primera experiencia amorosa: fue en 1985, con el chico más popular de su clase. De nuevo en el Madrid de los noventa, Elías, un joven casado, llama a su puerta. Los dos descubrirán su verdadera identidad, que lo importante radica en lo sencillo y que, ante la encrucijada, solo hace falta escuchar al corazón. Ellos todavía no lo saben, pero el destino ha querido que sean invulnerables.