"Un despunte de robos en una residencia de estudiantes no es el tipo de delito que suele despertar el interés de Hércules Poirot. Tras repasar la lista de objetos sustraídos o vandalizados, que incluía un estetoscopio, unos viejos pantalones de franela, una caja de bombones, una mochila rajada o un anillo de diamantes encontrado en un plato de sopa; Poirot felicitó a la directora, la señora Hubbard, por presentarle un caso «único y hermoso».