Una lectura que invita a reflexionar y tomar conciencia del panorama alimenticio actual para proponernos un sistema alimentario más sano, sostenible y, sobre todo, más rico en sabores y significado.«De las 6000 especies vegetales que han alimentado al ser humano a lo largo de su historia, hoy se conocen apenas 9, de las cuales tan solo 3 (el arroz, el trigo y el maíz) le aportan el 50 % de las calorías que necesita», con estas palabras Dan Saladino da inicio a un ensayo gastronómico sorprendente, en el que pone en el punto de mira la globalización y cómo está afectando al presente y al futuro de nuestra alimentación.En Comer hasta la extinción, viajamos por el planeta para descubrir los alimentos más amenazados —algunos incluso muy poco conocidos como el trigo kavilca, el queso stichelton o la cebada bere— y lo importante que es impedir que desaparezcan para siempre. Tomemos como ejemplo la miel; no el producto que se vende en envases de plástico en el supermercado, sino la miel silvestre que recolectan los hadza del este de África, que se comunican con los pájaros para localizar las colmenas